Especialidades
Los implantes dentales son dispositivos protésicos generalmente de titanio, que se utilizan para reemplazar a una o varias piezas dentarias perdidas. Se incluyen en el hueso simulando la raíz de una pieza dentaria natural. El dióxido de titanio, es un material muy biocompatible que, a diferencia de lo que muchas personas creen, no produce rechazo y que es capaz de unirse íntimamente al tejido óseo luego de un periodo de tiempo. El resultado son prótesis fijas que garantizan la estabilidad de las mismas al momento de hablar y comer. Por lo que devuelven la seguridad al paciente logrando una mejor sonrisa, soporte de los tejidos blandos (cachetes y labios) y un aspecto más joven.
La ortodoncia es la rama de la odontología que se especializa en diagnosticar, prevenir y tratar las irregularidades dentales, maxilares y faciales. La palabra que se utiliza para denominar estos problemas es “maloclusión” que significa “mala mordida”. La mayoría de la maloclusiones son heredadas pero algunas son adquiridas. Las heredadas se producen por una diferencia de tamaño entre maxilares y los dientes o distintos patrones faciales de los padres. Las maloclusiones adquiridas pueden ser causadas por hábitos como succión de dedo, interposición de la lengua al tragar, vías aéreas obstruidas por amígdalas grandes o adenoides, pérdida prematura de los dientes de leche o permanentes, etc. Cualquiera de estos problemas puede afectar al alineamiento de los dientes y también la apariencia facial. Hoy en día, son tan frecuentes los tratamientos en niños como en adultos de todas las edades. Por lo general, cuanto antes se descubre una alteración, más sencillo es su tratamiento. Es aconsejable incluso revisar a los niños a partir de los 4 años a fin de descartar o detectar y prevenir posibles alteraciones importantes. Existen diferentes tipos de tratamientos: - Brackets metálicos - Brackets cerámicos - Ortodoncia invisible